Los niños son el futuro de cualquier sociedad, eso es algo irrefutable. En ese futuro de la sociedad se invierte especial preocupación siempre, en su formación, en su protección, en su estado de salud… El hombre es el único animal que piensa en su futuro, el futuro de su especie y sus descendientes, más allá de la generación corriente. Aplicado a una familia o individuo en concreto, es pensar en sus hijos y en los hijos de sus hijos.
Tanto es así, que como ejemplo de esta preocupación, la semana pasada era noticia el éxito de la medicina, de la ingienería genética y de la ciencia para salvar a un niño de su enfermedad. Ese medicamento era otro niño, un bebe escogido y diseñado a tal efecto.
He aquí el dilema moral que abre innumerables interrogantes, algunos de los cuales esbozaba en los comentarios de un post anterior en este blog, pero que vuelvo a reproducir aquí de forma más directa:
- ¿Sería igual de importante el bebé si no hubiese curado al su hermano enfermo?
- ¿Qué ocurriría si el bebé medicamento desarrollase una enfermedad parecida a la de su hermano?
- Si se sigue desarrollando esta práctica, ¿se elaborará un servicio de niños a medida?
- Si la patología a resolver fuese debida a la carencia o malfuncionamiento de un órgano ¿se diseñarán niños con más de un órgano para que se donase al hermano?
- ¿Qué límite se puede establecer?¿O no se ha de establecer ninguno?
- ¿Qué ocurriría si después de seleccionar un embrión, tras su nacimiento no se desarrollase con normalidad?
- Si un futuro una familia quiere tener hijos preseleccionados sanos, o de forma que fuesen completamente compatibles entre ellos ¿estaría bien hacerlo?
- En el caso concreto de este primer bebé medicamento al que se le ha suprimido una enfermedad congénita, y al que seguramente se le habrá estudiado una y otra vez su ADN al completo, ¿qué enfermedades han dejado los médicos a las que este bebé sea propenso en un futuro?
- Cuando este bebé medicamento alcance la mayoría de edad, y su hermano necesitase algo más de él, pero el primero no se ofreciese… o el caso contrario, si el niño salvado tuviese que dar algo a su hermano medicamento pero no se ofreciese ¿qué pasaría?
También abrirá con toda seguridad unos dilemas médicos, sanitarios, sociales y económicos:
- ¿Qué casos se van a aceptar y qué casos no se aceptarán?
- ¿Existirán listas de espera como las tradicionales para una operación?
- Si se rechaza un caso, y posteriormente se demuestra que podría haber sido tratado mediante esta técnica ¿se podrá hablar de negligencia médica?
- ¿Cuanto dista la técnica del bebé medicamento de la clonación?
A pesar de todos estas preguntas, que pueden haber pasado por la razón de más de alguna persona, es todavía más llamativo como la legislación, cada vez más, certifica quien puede vivir y quien no. Quien es digno de morir, quien no debe nacer, quien debe sobrevivir, quien debe agonizar, quien no debe sufrir… y toda esta legislación al respecto no deja de contradecirse a sí misma:
- aborto y nacimiento dirigido
- eutanasia para enfermos terminales y solución genética «muy cara»
Otra cuestión todavía más llamativa, en este caso en cuanto a la opinión pública, es como alaba estos avances de ingeniería genética aplicados al ser humano, y por el contrario esas mismas técnicas aplicadas a plantas o animales están tan mal tratadas por los medios de comunicación y por los llamados ecologistas.
De todas formas esto es sólo es a grandes rasgos, pues el debate científico y moral no queda aquí. Hay más técnicas científicas y médicas, habrá nuevos impedimentos puramente técnicos, habrá más debates morales además de defender la vida de los no seleccionados, pero sobretodo siempre seguirán existiendo las enfermedades, las de siempre, las raras y las que saldrán nuevas.
quiero felicitar a las pearsnos tan ingeniosas que inventaron este supermegajuego tambien quiero saludar a mi madre por ser tan buena te quiero mami
Creo que en cuestiones medicas, siempre tendremos problemas en decidr sobre que es etico y que es suficientemente improtnate para intentarlo por el lado medico,