Es increible en lo que han terminado degenerando los programas emitidos en horario prioritario de las cadenas de televisión. Es que ayer me tragué el de la Milá, y menuda basura ha terminado siendo aquello que se trajo de Holanda como experimento sociológico. El Big Brother, aquí el Gran Hermano, tiene poca diferencia con un culebrón para mentes ávidas de rumores sentimentales.
Por supuesto la presentadora pone su ingrediente, para que la cosa parezca intrigante; y entre efectos sonoros, cambios de cámara, susurros y bandas sonoras retocadas retro, se consigue un magazine sobre el que se intenta levantar alguna conversación. La cual, por supuesto, es todavía más absurda que el argumentario del propio programa.
A grandes rasgos, programa y formato con vuelta y media, más que exprimido. No lo cambian por no pensar en algo nuevo. Producto televisivo de ínfima calidad para alimentar temporalmente la prensa rosa. El típico timo de televisión.
Yo la tele la veo como tiempo perdido. Cada vez que evito verla me alegro pensar que no me han robado x’s horas y que las he podido disfrutar realmente para mi y mi pareja.
Probadlo! es genial :D
Saludos
la tele esta llena de publicidad, yo solo veo los desinformativos por las mañanas.
Tengo una duda persistente desde que llego a la televisión un programa como Gran Hermano. ¿Las televisiones emiten esta telebasura porque la demandamos los televidentes, o los televidentes vemos estos programas simplemente porque es lo que podemos encontrar en Prime Time?
Si un martes a las 22h00 TVE1 emitiese un documental sobre el Amazonas, ¿qué cuota alcanzaría? Ahí están programas como callejeros o Madrileños por el mundo.
Les sorprenderá si les digo que no tengo Television hace mas de 3 años? y viendo esto creo que no me he perdido de nada.